UNITARIOS CONTRA FEDERICOS

Uno de los apóstoles mira los ojos de Jesús, y levantándose intempestivamente de la mesa le dice _¡Señor, uno de tus apóstoles te traicionará esta noche, y ese apóstol…será un porteño!-
Jesús, triste se dirige a uno de sus discípulos y le dice -¿Serás tu Judas?...-
A lo que Judas responde sorprendido -¿Por qué shoo troesmaa?...-

Y me tomo esta licencia, a partir de un chascarrillo de lugares comunes, para introducirlos en esta, nuestra homilía de todos los días (perdón me colgué con la ultima cena).

Esta entrada trata precisamente, del encono de odio, surgido a partir de la intrusión de la opinión pública porteña, en nuestra silenciosa realidad local. “¿Quiénes son estos iluminados, que se atreven a molestar cuando dormimos la siesta?”.

Pero los interlocutores, principalmente los militantes a conveniencia (generalmente por un sueldo), cuando no los concejales, diputados, se apropian del humor ciudadano, y vociferan por los medios “el formoseño no necesita que le vengan a decir como hacer las cosas”. La incógnita es ¿Cómo saben ellos lo que necesitan los formoseños, si jamás se bajaron de su auto para preguntarles?. ¿Lo intuye?, o se basa en un invento cómodo para no tener que decir nada.

Sencillamente hay gente heterogénea, flacos, gordos, negros, rubios, formoseños, chaqueños, correntinos, paraguayos, etc, conviviendo en la misma sociedad y no existe la masa “gente”, como le gustaría a los políticos que fuese.

Porque si lo que se representa mediáticamente o políticamente, es la “voz” de la gente, literalmente como digo siempre, estaríamos hasta las pelotas, porque la “voluntad” de la gente sería de la que hablan los políticos, y no seriamos una sociedad, sino un cementerio.

Ahora bien, estos etnocentrismos masificantes, tienen mas que ver con la puesta en escena de cada político, en este caso formoseño, sus limitaciones culturales, y lo mas importante de todo, los caprichos del jefe supremo, y la imposibilidad absoluta de estos chatos interlocutores de siquiera pensar en criticar mínimamente la voz del amo.

Por otra parte, si dijeran la verdad, quien sería el imbécil que los votaría.

A partir de este punto, es donde retomo la cuestión.

Pude leer en editoriales locales, criticas al gobierno de Macri, por las últimas inundaciones en la ciudad de Buenos Aires, como una especie de devolución por la intrusión con el tema de las cucarachas locales en los Hospitales.

Esto me generó como siempre, una especie de epilepsia convulsiva, lo que me llevo a pensar que el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, con los quilombos que tiene debe estar preocupadísimo con la critica de “Entre Gallos y Medianoche” del diario formoseño la Mañana, o el holding monopólico golpistoide imperialista y desestabilizador Clarín tiembla de terror por el “quierovalecuatro” de este mismo diario, también plurimediático (micromini), que defiende el federalismo y los etnocentrismos masificantes, perdón, digo la formoseñeidad ante el atropello unitario.

Y es precisamente en este punto, donde la incongruencia entre el discurso y la realidad, es una masa crítica irrefutable.

Si los porteños son petulantes, soberbios, invasores, centralistas,¿Porque todos los funcionarios oficialistas y opositores, quieren tener un departamento en la ciudad de Buenos Aires?. ¿Por qué los provincianos federales, los que tienen el dinero inexplicable (generalmente funcionarios, diputados, etc) mandan sus hijos a estudiar a la UBA, a la Universidad de Belgrano, y ni pensamos en la Universidad de Formosa como una posibilidad?

¿Cuál es el sentido de ridiculizar a una ciudad, con alternancia política, con autopistas de todo tipo, con servicios del primer mundo, con usuarios y consumidores de aplomo, con el PBI mas alto del país, cuando después los provincianos (formoseños), hacemos lo imposible para pertenecer a ese status quo?.

Todavía me acuerdo cuando Marcelo Tinelli expuso hace unos años, que uno de sus vecinos en las Torres Le Parc en Puerto Madero cuyos precios oscilan entre los 4000 y 5000 dolares el metro cuadrado, (calculen uds. Cuanto sale un depto de 310 mts2 o de 410 mts2) era nada menos que el Gobernador Gildo Insfran.

Entonces no seamos hipocritas, sobre todo aquellos que viven holgadamente e inexplicablemente de la teta del estado como para sostener este status quo.

Los que hoy gritan a los cuatro vientos contra el centralismo, son los mismos que se matan por un depto en Av. Santa Fe, ir al Shopping todos los fines de semana, jugar al tenis o un fulbito a la vuelta de manzana.

O que me expliquen ¿porque los mejores negocios en la Provincia son de Holdings porteños? ¿Dónde quedó lo de “combatiendo al capital”?. ¿Por qué la mayoría de los que desfilan por la Subsecretaria de Comercio con una infinidad de boletas pro-formas (conocidos mios) cuando te saludan, te dicen “que haces chabón”?.

El poder se detenta desde Buenos Aires, pero los que detentan el poder a ella se abrazan, no importando de donde provengan.

El peor porteño no es el porteño de nacimiento, sino el provinciano aporteñado.

Leonardo Fernández Acosta.